México del Norte
Por Jorge Mújica Murias

Varios activistas en favor de los derechos de los inmigrantes, desde Chicago hasta Seattle, lanzaron la consigna de no votar en las elecciones generales de noviembre, especialmente en favor del Partido Demócrata. Es la respuesta a lo que llaman “la traición de Obama”, su decisión de no tomar ninguna acción ejecutiva antes de las elecciones, respecto a inmigración, después de que había prometido hacerlo.

El llamado a no votar obtuvo reacciones de conocidas figuras como Eliseo Medina y Dolores Huerta, y el multimillonario Henry Cisneros, ex Secretario de Vivienda con Bill Clinton. Huerta, por ejemplo, declaró que “tenemos que ver el panorama completo y no dejarnos atrapar diciendo que la queremos ahora (…) somos una comunidad que puede esperar”, agregando que “tenemos que tener fe en nuestro presidente…”.

En cambio, los activistas de la Coordinadora Nacional por una Reforma Migratoria Justa y Humana 2014, dicen abogar “por un inmediato alivio administrativo” y se oponen a “esperar hasta después de las elecciones intermedias, a menos que el presidente suspenda las deportaciones hasta que otorgue la acción ejecutiva. Las familias migrantes”, dicen, “no deben pagar un alto precio por el nerviosismo electoral del partido demócrata”. Recomiendan “a los votantes latinos, no apoyar a ningún candidato demócrata o republicano en las elecciones intermedias, que no apoye un inmediato fin a las deportaciones y un alivio migratorio, particularmente en las 5 a 9 reñidas contiendas del senado, que son la mayor preocupación para los líderes del partido demócrata”.

Estoy con ellos. La victoria del Partido Demócrata en las elecciones no significa, ya lo sabemos por la historia reciente, una solución a la problemática inmigrante, y su derrota, por otro lado, no es nuestra culpa. Es culpa de los Demócratas que no cumplieron nunca, ni cuando tenían la Casa Blanca y mayoría en la Casa de Representantes y en el Senado.

¡Gutierritos Al Poder!

Pero parece haber otra estrategia. De pronto, zas!, nos llega un e-mail, del cual transcribo algunos párrafos, y aclarando que está literal, con todas las faltas de ortografía, caligrafía, gramática y sentido común que aquí aparecen:

“Nosotros los abajo firmantes, por lo tanto haber sido traicionado por el Presidente y el partido demócrata, y enfrentando la realidad de las continuas deportaciones injustas y separación de nuestras familias en los millones, apoyo el proyecto de obligar a Congresista Luis Gutiérrez para funcionar como nuestro candidato independiente para la Presidencia de Estados Unidos en el año 2016 si Presidente Obama no utiliza su autoridad que le hemos dado para que pare las deportaciones antes del 27 de noviembre de este año. Nos comprometemos también a marchar durante el fin de semana de Dar Gracia, para mostrar la unidad de nuestra comunidad”.

Deduzco, además de que el redactor usó Google para traducir, que hemos “sido traicionado por el Presidente y el partido demócrata”. Eso implica que antes éramos aliados, porque solamente los aliados pueden traicionar, y los dos mencionados nunca lo fueron. Han sido titiriteros, manipuladores, compradores y vendedores del movimiento pro-inmigrante, pero no aliados.

Segundo, que “a Congresista Luis Gutiérrez” se le puede obligar a hacer algo, lo cual no creo. Ni siquiera se le puede obligar a representar debidamente a su Distrito, menos a hacer otra cosa. Tercero, que lo quieren obligar a “funcionar”, lo cual sería aún más difícil.

Cuarto, de que si lo obligan y funciona, sería “nuestro candidato independiente para la Presidencia de Estados Unidos en el año 2016 si Presidente Obama no utiliza su autoridad que le hemos dado para que pare las deportaciones antes del 27 de noviembre de este año”. Eso está interesante. Primero, asume que nosotros le dimos algún poder a Obama, aseveración que no entiendo, y segundo, que Gutiérrez abandonaría el Partido Demócrata al que ha pertenecido desde que era chiquito, y que se lanzaría por su lado como candidato presidencial.

Eso trae más problemas. Primero, que Luis sin el Partido Demócrata no es nadie. Fuera del Partido Demócrata Luis sería un oscuro burócrata del Estado de Illinois, de donde originalmente salió, y nadie lo conocería. Segundo, que el 27 de noviembre es después de las elecciones, así que como forma de chantaje o argumento para convencer a Obama de actuar antes de las elecciones pues simplemente no funciona.

Pero en fin. La estrategia del llamado Pueblo Sin Fronteras, sería elegir como presidente a un congresista que durante 22 no ha conseguido la aprobación de una sola propuesta de ley. No sé por qué piensan que podría resolver la problemática migratoria.

A la mejor la propuesta pega, porque más allá de chantaje para obligar a Obama a hacer algo, ¡ya de plano suena a terrorismo!

Jorge Mújica Murias mujicam@gmail.com