Tras cinco años en la Fuerza Naval de los Estados Unidos, y tras laborar para diversas compañías, Eduardo Barreto logró cumplir una meta empresarial al convertirse en gerente de Oficina y socio de Pacific Coast Auto Detail Center, Inc.
Esta compañía de servicios automotrices fue fundada en 2004 por su socio R.J. Baylor. En 2005, Barreto se sumó a la empresa y fue hasta el 2010 cuando pasó a ser socio.
Eduardo Barreto es originario de El Paso, Texas, en donde vivió y creció hasta que terminó de cursar la preparatoria. Su madre era de Chihuahua, México, y su padre es originario de San Juan, Puerto Rico.
“Yo crecí con mi padre de origen coreano-americano quien estaba en el ejército”, comentó. “Yo crecí comiendo comida mexicana, asiática y por su puesto americana. Así fue como me criaron”.
Cuando Eduardo era joven, él planeaba ir a la universidad con la meta de estar en el mundo de los negocios con una línea de ropa para caballeros.
“En una clase de administración de empresas en la preparatoria tuvimos una tarea de crear un modelo de negocios”, comentó. “Yo iba a usar mi apellido, Barreto, como nombre para una línea de ropa conformada por trajes y ropa hecha a la medida. Esa era mi meta.”
Antes de seguir su meta, Eduardo acompañó a uno de sus amigos con un reclutador de la Naval porque su amigo quería entrar a las fuerzas armadas. El reclutador terminó convenciendo a ambos a que entraran a la agencia para servir a su país.
“El reclutador nos dijo que podíamos viajar por todo el mundo y que luego nos iban a ayudar a estudiar la universidad. Es una historia chistosa. Mi amigo y yo hicimos la prueba para entrar a la Fuerza Naval, y él no la pasó y yo sí”, comentó. “Ni siquiera me  informe acerca de la Naval porque mi plan era ir a la universidad. Pero a mí me pareció grandioso ver el mundo antes de entrar a la universidad”.
Una semana despues de su graduacion de la preparatoria, Eduardo se fue a Chicago para iniciar con su entrenamiento naval. Su primera estación fue en San Diego bajo el buque USS Independence. Luego se trasladó a Japón donde vivió por unos años y posteriormente ingresó al escuadrón VF11 que era parte del portaaviones  USS Carl Vinson.
Después de cinco años en la agencia de seguridad, Eduardo tuvo que salir por licencia médica, por lo que fue dado de baja con todos los beneficios que se le otorgan a los veteranos.
“A mí me encantó ser parte de la Fuerza Naval. El entrenamiento fue fantástico. Te da un sentido de pertenecer a algo. Todos tenemos que trabajar juntos para poder lograr una meta”, comentó. “Mi experiencia naval me ayudó en el mundo de los negocios. Se tiene que trabajar en equipo para poder cumplir con la meta de tener clientes satisfechos. Ser parte de la milicia te enseña muchas cosas; pude utilizar esas bases para mi transición a la vida civil. En todos mis siguientes trabajos pude tener éxito”.
Cuando Eduardo se retiró de la Naval, decidió quedarse a vivir en San Diego. Aquí, el trabajó para diferentes empresas e industrias, desde hoteleria hasta construcción.
“Cuando estaba trabajando en construcción me gustaba poder ver el resultado final de los proyectos”, dijo. “Y cuando estaba a punto de terminar uno de esos proyectos fue cuando tuve la oportunidad de empezar a trabajar con R.J. en la empresa de detallado”.
Su trabajo para Pacific Coast Auto Detail Center, Inc. inició en la oficina, con la administración de documentos incluyendo la creación de una lista de clientes, e incluso la creación de cuentas en redes sociales.
“Yo hago todo en la oficina”, dijo. “Y mi socio hace todo en la bodega”.
Barreto ahora cuenta con 12 años de experiencia dentro de esta empresa que se dedica al detallado y reparación de vehículos.
“La transición de tener una línea de ropa a una empresa de detallado sigue siendo mi enfoque en los negocios. Me toca ver como Toyotas y Kias hasta automóviles hermosos como Ferraris o Lamborghinis valorados en medio millón de dólares”, comentó. “Todo lo que aprendí de vehículos, lo aprendí de mi socio”.
“Cada año estamos creciendo. Nuestra clave del éxito es el trabajo duro. Un negocio no se trata de trabajar de 9 a.m. a 5 p.m., sino de entregar toda nuestra pasión para que tenga éxito”, comentó. “Cuando salgo de la oficina sigo contestando correos. Hubo un tiempo en que no descansaba ni un sólo día para poder tener el negocio funcionando”.
La primera ubicación del negocio fue entre las calles 12 y G en el Centro de San Diego, pero después de varios cambios, se establecieron en su dirección actual en las calles Market y 27 desde el 2013. Una de las próximas metas de la empresa es añadir un segundo centro para poder servir a más clientes.
“Entre más servicios se pueda ofrecer mejor. Nadie tiene el tiempo de estar atendiendo a su carro todo el dia. Nosotros hasta vamos a recoger su carro hasta donde esté”, comentó Barreto. “Nosotros también hemos agregado servicios que nuestros clientes nos piden. Cada año añadimos más. Este 2017 queremos ofrecer más servicios de polarizado de ventanas y mas reparaciones de pinturas”.